Los cuerpos de los niños asesinados a mazazos junto a sus papás en Campana fueron entregados este mediodía a sus tíos. No habrá velatorio para que "descansen en paz junto a sus padres", confirmaron sus familiares
La Justicia había dispuesto la entrega de los cuerpos a Miriam Rabaga, tía de los niños. Este mediodía se procedió a materializar la decisión.
En este camino, se adelantó que no habrá velatorio sino que los niños serán directamente inhumados en el cementerio privado Parque del Buen Camino, donde están sus padres, tras una misa de cuerpo presente.
"No vamos a velar a los chicos porque queremos que rápidamente estén con sus padres descansando en paz y reclamamos Justicia y cárcel para todos los responsables de la masacre y todos los que dejaron que pase esto", añadió Mirian, hermana de la asesinada Sandra Rabago.
Según las primeras pericias, los niños habían sido asesinados al mismo tiempo que sus padres, Marcelo Mansilla (41) y Sandra Rabago (37) y con el mismo hacha. Pero pericias posteriores determinaron que fueron asesinados 12 horas después del crimen de los papás.
Si bien el arma aún no fue encontrada, las pistas que hay contra los acusados son bastante firmes. Hay evidencias de ropas manchadas con sangre y diversos testimonios que involucran a los cuatro detenidos por el terrible hecho.
También se supo que Agustín habría recibido 9 heridas contuso-cortantes y su hermana Milagros, alrededor de 20.
Los cuerpos de los niños se encontraban en un arroyo, a unos cuarenta metros de la cinta asfáltica y en las inmediaciones del country El Bosque. De esta manera, el caso se convirtió en un cuádruple homicidio, ya que fueron asesinados los cuatro integrantes de la familia.
Se esperan los resultados de la autopsia a los cuerpos de los menores de edad, para indagar a los cuatro detenidos por el caso.
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